Por Vilma Filici
El Ministro de Inmigración, Refugiados y Ciudadanía, Sean Fraser, anunció esta semana la extensión del programa Piloto Agroalimentario, el cual se extenderá hasta el 14 de mayo del 2025. Este programa fue lanzado en mayo de 2020 y busca facilitar la transición de trabajadores experimentados en agricultura e industrias alimentarias hacia la residencia permanente en Canadá.
Para apoyar a los empleadores y candidatos, el Ministro también anunció la eliminación de los topes ocupacionales anuales, es decir los límites de cuántos candidatos pueden postularse para una ocupación específica bajo el programa piloto. La eliminación de estos límites brindará la oportunidad de postularse a más candidatos elegibles.
De igual forma anunció que para fin de año, el departamento de Inmigración tiene la intención de introducir nuevos cambios en el programa piloto por etapas, que incluyen ampliar el acceso a permisos de trabajo abiertos a los familiares de todos los participantes en el programa piloto agroalimentario, independientemente del nivel de habilidad laboral del participante; permitir que los sindicatos certifiquen la experiencia laboral de un candidato, como alternativa a las cartas de referencia del empleador; dar a los solicitantes que residen en Canadá la opción de cumplir con el requisito de oferta de trabajo, incluido el requisito de salario medio para la oferta de trabajo, o el requisito de educación, incluida la verificación de evaluación de credenciales educativas; y aceptar la experiencia laboral obtenida bajo un permiso de trabajo abierto para trabajadores vulnerables, brindando a más trabajadores la oportunidad de calificar.
Para calificar para la residencia permanente a través de este programa las personas interesadas deben tener “experiencia de trabajo elegible”, lo que significa que debe ser un trabajo a tiempo completo, que no sea de temporada y que dure todo el año, debe trabajar por lo menos 30 horas por semana y, si en la compañía con la que va a trabajar tiene sindicato, el solicitante deberá recibir un salario que esté acorde con el contrato colectivo de trabajo. Si la empresa no tiene sindicato, el trabajador deberá ser pagado acorde con lo que el Departamento de Recursos Humanos de Canadá establezca para dicha posición.
Es importante destacar que este programa solamente le permite solicitar la residencia permanente a las personas que ya están en Canadá y que están trabajando durante todo el año, lo que implica que la gran mayoría de los trabajadores agrícolas que vienen a trabajar por temporadas, que vienen a plantar y a cosechar y luego se regresan a sus países, no van a calificar.
Esa es una lástima ya que quienes quedan excluidos son los trabajadores agrícolas que han estado viniendo a Canadá por décadas a producir nuestros alimentos, y quienes se van benefician solo son una minoría que incluye a quienes vienen a trabajar en ocupaciones específicas y vienen a trabajar durante todo el año en estas industrias.
También, un requisito del programa es que los solicitantes tengan un nivel de por lo menos 4 en inglés o francés en lectura, escritura, hablar, escuchar y entender. Y creo que eso también es otra limitante para el tipo de personas que vienen bajo el programa de Trabajadores Agrícolas Temporales, ya que el manejo de un segundo idioma no es necesariamente lo que estas personas pueden llegar a tener.
Además, para aplicar para este programa se debe tener un certificado equivalente a una escuela secundaria canadiense, y la misma debe ser acreditada por una institución educacional que es designada por el gobierno canadiense, tal y como sucede con los Trabajadores Calificados y otras categorías de inmigración.
Adicionalmente, los solicitantes deben tener suficiente dinero en consonancia con la tabla conocida como Low Income Cut-offs (LICOs), por lo que una persona soltera debe demostrar que, al momento de hacer la solicitud para la residencia permanente, y al momento de obtenerla, tiene por lo menos 12,960 dólares disponibles en cash. Si es una pareja, deberá tener un poco más de $16,000, y si son tres personas (una pareja con un hijo) deberán tener un poco más de $20,000. El monto va incrementando en alrededor de $4,200 por persona adicional en la familia, ya sea que vengan todos o no a Canadá.
Es decir que si el trabajador agrícola no va a traer a toda su familia, al solicitar su residencia permanente, si tiene dependientes en su país de origen, debe cumplir con ese requisito financiero que implica a toda su familia para poder calificar en el programa. Porque si la persona califica y obtiene la residencia permanente, puede venir todo su núcleo familiar a Canadá con el estatus de residentes permanentes.
Las ocupaciones que se están buscando para este programa son las que tienen que ver con producción de todo tipo de carnes, ya sean aves, reses, cerdos, ovejas, etc. Además, están buscando carniceros industriales y carniceros que trabajen en las ventas minoristas, supervisores y trabajadores especializados en ganado, así como también se buscan procesadores de alimentos, jornaleros y supervisores de granja, entre otros.
Es decir que quienes tienen mejores posibilidades de calificar para este programa son quienes tienen ocupaciones como supervisores y especialistas en ganado, porque generalmente esas son las persona que tienen más estudio y que por tanto podrían llegar a tener el nivel de inglés requerido.
El programa comenzó a funcionar inmediatamente fue anunciado en el 2020 con una duración de tres años, y ahora tiene una extensión de dos años más.
Otro requisito de este programa es que los solicitantes deben haber trabajado en Canadá por lo menos durante un año en los últimos tres años, en un trabajo a tiempo completo y no de temporada, y durante todo el año.
Los aranceles para este programa, que es considerado de la Clase Económica, son de $825 por cada adulto por el pago para el procesamiento, más el impuesto a la residencia permanente que es de $500. Para cada hijo incluido en la solicitud el costo es de $225.
La crítica que se le hace a este programa es que tiene demasiadas limitaciones y que las personas que vienen anualmente a trabajar y hacer la producción necesaria en las granjas no van a ser beneficiadas porque los requisitos están muy elevados.
Otra cosa es que no se piensa muy bien en la retención de los trabajadores, porque este programa fue creado precisamente porque los granjeros están diciendo que hay vacantes que no pueden llenar de trabajadores en la industria agropecuaria, entonces se creó este programa con la intención de que si se les da la residencia permanente se van a quedar.
El problema es que, si estos trabajadores están muy calificados, si tiene estudios postsecundarios, si tienen un buen nivel de inglés, si tiene experiencia de trabajo en gerencia y supervisión, obviamente no son personas que se van a quedar haciendo esos trabajos con los cuales obtuvieron la residencia permanente. Una vez que obtengan la residencia permanente, lo más seguro es que tal y como está permitido por la Carta de Derechos y responsabilidades del ciudadano, la persona pueda dejar ese trabajo e irse a trabajar en cualquier otra cosa, y por lo tanto esas vacantes que hay en estas industrias van a continuar, y el problema no va a ser solucionado con este programa.
“Nuestros agricultores y procesadores de alimentos dependen de la llegada constante de trabajadores extranjeros para que las actividades de plantación, cosecha y procesamiento de alimentos puedan llevarse a cabo durante todo el año, y necesitan nuestro apoyo continuo para atraer y retener a estos trabajadores talentosos. Extender el Piloto Agroalimentario ayuda a estos sectores a encontrar los empleados que necesitan, por lo que podemos estar seguros de que nuestra seguridad alimentaria, economía y nivel de vida para los canadienses en todo el país seguirán mejorando y creciendo”, dijo el ministro Sean Fraser al momento de hacer el anuncio de extensión del programa.
Vilma Filici, presidenta de Filici Immigration Services, es profesora de leyes de inmigración y refugio en Seneca College Toronto, y asesora en materia de inmigración para diversas organizaciones comunitarias. Escribe sobre asuntos migratorios en varios medios hispanos de Toronto y es fuente de información para, entre otros, los diarios Toronto Star y Toronto Sun, y las emisoras Radio Canadá y CBC.