Por Rhodie Lamour
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Más que nunca el cambio de año trae nuevas esperanzas. Los sectores, cuya actividad depende de una solida labor de relaciones humanas, han encontrado nuevas formas de continuar; o tuvieron que esperar y comenzar de cero. En ambos casos, la reactivación económica es necesaria.
La reactivación depende directamente de los esfuerzos de todos los sectores y personas involucradas. No se produce por sí sola ni es mágica. Es, de hecho, un momento único para experimentar y ser testigo. Veamos entonces cómo se vive esta realidad en el sector que más conozco, la moda.
La moda, uno de los sectores más afectados, va recuperándose de la crisis que comenzó un poco antes de marzo de 2020. Es cierto que muchos comercios han tenido que cerrar sus puertas, y algunos empresarios han renunciado a sus sueños mientras que otros creen estoicamente que lo mejor está por venir.
De este modo, vivimos, concretamente en Montreal, un furor colectivo por retomar las riendas. Para esto, existen muchas iniciativas y tenemos la hermosa impresión de que la solidaridad nos da pronta cita. De tal modo que muchas instituciones financieras y organismos gubernamentales están apoyando más que nunca al frágil sector de la moda.
Concretamente, como miembro de MMode, red metropolitana de la moda en Montreal, me gustaría compartir con ustedes un poco sobre nuestra iniciativa de reactivación del pasado 13 al 19 de septiembre, la “Semana de la Moda de Montreal”, y que se basó en la aplicación del lema “Juntos llegamos más lejos” que suele mencionar nuestra Directora Ejecutiva, Debbie Zacaib.
La moda, en todos sus aspectos, ha sido siempre representada tanto por la vestimenta que por accesorios e incluso por conferencias. Con un compromiso mediático, orientado a la visibilidad de todos los participantes, esta iniciativa destacó a varios talentos. Como participante, me gustaría tomar esta oportunidad para invitar a todos los profesionales que deseen formar parte de la reactivación económica a que se unan y se impliquen en su sector. Considero que aislados sería más difícil retomar el camino o codearse con nuevos talentos.
También destaco la importancia de tener un espíritu inclusivo ya que esto favorece los intercambios y las colaboraciones. En mi caso, soy embajadora de una marca miembro de MMode, Cochic Style, una marca de ropa y accesorios. Y esta información la compartí durante mi charla en la “Semana de la Moda” acerca de la imagen como un activo de la comunicación.
La razón por la que te doy este ejemplo es para animarte a salir del aislamiento en los negocios, a creer en el futuro mientras haces algo concreto en el presente. Establecer una red de contactos nos activa en grupos, según el mercado objetivo o nuestras necesidades. Este es otra astucia para impulsar esta recuperación. En el caso de las mujeres, para construir una red sólida y de calidad, recomiendo encarecidamente la RFAQ (Réseau des femmes d’affaires du Québec), en la que participo con entusiasmo como presidenta regional de Montreal Este. En general, las cámaras de comercio de su región o según su área de actividad también son beneficiosas.
Por último, cambia de actitud. Si las estrategias de recuperación mencionadas anteriormente no marchan, entonces mantente intenso en tus propósitos y busca ayuda si es necesario en el área que requieras optimizar. Atrévete a ser diferente y recibe los cambios con una mirada positiva para avanzar.
Si tienes alguna pregunta sobre este artículo, será un placer conversar contigo.
Rhodie Lamour es especialista en imagen personal y corporativa. Graduada en el Fashion Institute of Technology de Nueva York (FIT) y en el Image Colors Resources de Nueva York (IRCNY). Radica en Canadá desde 2018 y es miembro activo de la Asociación Internacional de Consultores de Imagen (AICI), la Sociedad de Investigación del Color de Canadá (CRSC), el Réseau des Femmes d’Affaires du Quebec (RFAQ) y la Grappe Mode Metropolitaine (MMODE).