Las infecciones por neumococo están causadas por una bacteria llamada Streptococcus pneumoniae, también conocido simplemente por “neumococo”. Estas infecciones pueden provocar diferentes enfermedades, como neumonía, otitis, meningitis, septicemia y otras enfermedades de las vías respiratorias altas.
¿Qué es lo hay que saber sobre las infecciones por neumococo, y cómo nos protegemos de ellas?
Transmisión: las infecciones por neumococo se transmiten en general por las gotas de saliva que se desprenden al toser o estornudar. El neumococo puede también estar presente en la garganta de una persona sana y portadora sin causar ningún problema, pero aun así puede transmitirse a otras personas.
Síntomas: la manifestación de una infección por neumococo varía según el tipo de infección. Los síntomas más típicos incluyen fiebre, tos, dificultad para respirar, erupciones cutáneas, dolor de cabeza muy fuerte, y hasta una importante rigidez de cuello y estado de confusión en caso de meningitis.
¿Quién está en riesgo?: ciertas personas son más susceptibles que otras a desarrollar infecciones por neumococo, sobre todo los niños pequeños, las personas mayores, las personas fumadoras y las personas que tienen enfermedades pulmonares y cardiovasculares crónicas, así como las personas con un sistema inmune debilitado o con problemas de bazo.
Tratamiento: las infecciones por neumococo pueden tratarse eficazmente con antibióticos, pero se debe consultar a un médico desde el primer síntoma para realizar un buen diagnóstico y tratamiento precoz.
¿Qué puedo hacer yo para prevenir estas infecciones?
La vacuna es la principal medida de prevención contra este tipo de infecciones. Las vacunas contra el neumococo están recomendadas para los bebés lactantes, los niños pequeños, adultos y personas mayores, especialmente aquellos que tienen más riesgos de desarrollar una infección. Consulte con su médico o su farmacéutico qué vacuna es la más adecuada para usted.
Lavarse las manos regularmente y evitar tocarse el rostro con las manos sucias puede reducir también el riesgo de contraer y de propagar las infecciones respiratorias, incluidas las infecciones por neumococo.
Además, es importante evitar el contacto con personas enfermas y cubrirse la boca y nariz al toser o estornudar.
Para protegerse a usted y a los demás de las enfermedades por neumococo, asegúrese de mantener una buena higiene, evitar el contacto con personas enfermas si es posible, seguir las recomendaciones de vacunación y consultar a un profesional de la salud (farmacéutico, médico…) si tiene síntomas.
Para obtener más información, póngase en contacto con la Alianza de Comunidades Culturales para la Igualdad en la Salud y los Servicios Sociales (ACCÉSSS) accediendo al sitio web www.accesss.net