Cuidado con las estafas ante un eventual programa de regularización para indocumentados

Foto: CBC.CA
Por Vilma Filici (filici@filici.com)

Recientemente, el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, envió sus “Cartas de Mandato” (Mandate Letters) a todos sus nuevos ministros, y en la que correspondía el ministro de Inmigración, Refugiados y Ciudadanía, Sean Fraser, le ordenaba, entre otras cosas, buscar la manera de implementar o expandir programas para la regularización de los indocumentados.

“Aproveche los programas piloto ya existentes para explorar más a fondo las formas de regularizar el estatus de los trabajadores indocumentados que contribuyen a las comunidades canadienses”, le decía literalmente el primer ministro al ministro de Inmigración.

Pero esta información, que efectivamente es verídica y sumamente esperanzadora para las personas que viven de forma indocumentada en Canadá, podría estar abriendo las puertas a que personas inescrupulosas se aprovechen de una comunidad vulnerable como es aquella que vive sin un estatus legal en el país.

Definitivamente estas personas deben tener mucho cuidado porque en el momento en que sale cualquier tipo de noticia con alguna esperanza por parte de los oficiales de Inmigración, y en este caso específico de parte del primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, y del ministro de Inmigración, Refugiados y Ciudadanía, Sean Fraser, esto da pie a que algunas personas puedan usar esta información de manera incorrecta o fraudulenta.

Lo que sabemos hasta ahora es que el primer ministro de Canadá, en uno de los varios mandatos que le entregó en la carta al ministerio de Inmigración, es que tiene que expandir los programas piloto que ha habido para la regularización de los indocumentados, eso es realmente lo único que sabemos hasta el momento. Ahora, queda en manos del ministro y de los burócratas desarrollar cualquiera sea el programa que se vaya a utilizar para la regularización.

Si nos guiamos por los dos programas que han salido en los últimos años, vemos que había un límite en términos de cuántas personas iban a ser procesadas por medio de estos programas, y en ese momento fueron 500 los cupos establecidos en cada uno, así que no sabemos si en el momento en que se lance un programa de regularización más amplio va a ser también limitado, es decir que haya un número específico de personas que pueden aplicar y una vez que se llene ese monto se termina de aceptar aplicaciones.

Todavía no sabemos cuáles van a ser los requisitos que los solicitantes tendrán que cumplir, o si habrá una fecha específica de arribo para poder calificar, por ejemplo, que pueda decir “los que hayan llegado desde tal fecha en adelante y tengan tantos años en Canadá pueden aplicar y estos son los requisitos que tienen que cumplir”. En este sentido no podemos especular porque no tenemos en realidad idea de qué manera se va a desarrollar este programa de regularización.

En este sentido, el consejo que le quiero dar a las personas que se encuentran en el país de forma indocumentada es que, por favor, no dejen que personas inescrupulosas se aprovechen de su necesidad de regularización, no dejen que saquen partido de la información dada por las autoridades. Hay que ver el mandato exactamente como fue dado, y queda claro que hay que crear un programa, pero todavía no hay nada concreto.

Mi experiencia del pasado es que ha habido muchos fraudes, y cuando hablo del pasado estoy hablando de mis 37 años de experiencia en este campo. En ese periodo he visto demasiadas situaciones donde personas sin escrúpulos han dado falsa información a este grupo que es tan vulnerable y necesitado y tan deseoso de poder regularizarse.

En el pasado hemos visto, por ejemplo, personas que empiezan a cobrar dinero para representar a clientes en el momento futuro en el que salga el programa. Hemos visto personas anunciando regularización y cobrando dinero para algo que no existía, entonces el consejo es que hay que esperar a que haya otro anuncio oficial por parte del gobierno, y una vez que se difunda, entonces sí vayan a consultar con un profesional calificado y honesto para ver exactamente qué es lo que ha dicho el gobierno o qué se ha lanzado, para saber si la persona califica de acuerdo a los requisitos.

Ahora, basándonos en el pasado y en los programas piloto que fueron lanzados en los últimos años, sabemos que hay ciertos factores que son absolutamente importantes, y yo diría esenciales, porque aparecieron en los dos programas. Estos son el establecimiento económico, es decir las personas que han trabajado en Canadá y que han estado laborado siempre y que tienen trabajos con los cuales han podido mantener a sus familias; esos programas obviamente también miran si el solicitante tiene récord en términos de criminalidad, es decir, que si es inadmisible por razones criminales lo más probable es que no pueda aplicar; también revisan la situación médica del solicitante, si la persona es admisible o no por razones médicas; y además consideran el dominio del idioma inglés o francés como un elemento determinante.

En esta lógica, mi primer consejo a las personas que se encuentren indocumentadas en Canadá y que estén esperando que haya algún tipo de programa para poder regularizar su situación, es que por favor no vayan a pagar dinero a consultores y abogados antes de que haya un anuncio oficial y donde se sepa exactamente cuáles van a ser los requisitos para que las personas califiquen.

Mi segundo consejo es que, si no tiene un nivel de idioma oficial medio, empiecen a estudiar inglés o francés, porque creemos que habrá un requisito de un cierto nivel de idioma. Puede ser un nivel avanzado, puede ser un nivel medio, eso está por definirse, pero lo que sí deben de tener seguro es que sí va a haber un requisito de un nivel de inglés o francés.

Sé que con la pandemia tratar de hacer esto es muy difícil porque hay muchos problemas en las escuelas, no hay clases presenciales y casi todo se está haciendo virtualmente tanto en las universidades como en los colleges, pero se pueden tener clases virtuales. Tal vez tengan que pagar un cierto monto de dinero, pero hay escuelas privadas donde se puedan registrar, también hay centros comunitarios, hay programas del gobierno para aprender inglés, también las bibliotecas públicas tienen programas de inglés o francés, pero definitivamente en eso es en lo que deberían de estar trabajando para tener posibilidades de que cuando salga algún tipo de programa de regularización cumplan con los requisitos.

Ahora, si al final el programa de regularización de personas sin estatus migratorio establece eventualmente un cupo específico, por ejemplo, que se van a aceptar solamente a 90,000 y los que lleguen primero van a ser los procesados, lo que va a suceder es que para el resto de las personas el haber estudiado uno de los idiomas oficiales de Canadá no será una pérdida de tiempo, sino todo lo contrario. Recuerden: si la persona se encuentra en Canadá trabajando, si tiene un buen nivel de inglés, si ha hecho trabajo comunitario, si tiene hijos nacidos en Canadá o hijos y que no hayan nacido en Canadá pero que estén en este país o en el país de origen pero que todavía dependen de los padres para su subsistencia, siempre se puede hacer una solicitud por razones humanitarias y de compasión si el caso lo amerita.

Así que no se deje engañar por personas inescrupulosas, pero prepárese desde ya para un posible programa de regularización de personas indocumentadas, mejorando su manejo del idioma inglés o francés, porque aún si no logra entrar en esa regularización, lo aprendido le va a servir para poder hacer un pedido de residencia por razones humanitarias y de compasión.


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Vilma Filici, presidenta de Filici Immigration Services, es profesora de leyes de inmigración y refugio en Seneca College Toronto, y asesora en materia de inmigración para diversas organizaciones comunitarias. Escribe sobre asuntos migratorios en varios medios hispanos de Toronto y es fuente de información para, entre otros, los diarios Toronto Star y Toronto Sun, y las emisoras Radio Canadá y CBC.