Ofertas de trabajo y otras claves para inmigrar a través del Express Entry

Imagen: Canus Inmigration.
Por Vilma Filici (filici@filici.com)

El te­ner una ofer­ta de tra­ba­jo de una com­pa­ñía ca­na­dien­se en Cana­dá, ya sea en On­ta­rio o en cual­quier otra pro­vin­cia, obviamente es un gran beneficio para las per­so­nas que quie­ren hacer una so­li­ci­tud de re­si­den­cia per­ma­nen­te en el país. El te­ner una ofer­ta de tra­ba­jo cuan­do se tra­ta de una no­mi­na­ción pro­vin­cial fa­ci­li­ta la ob­ten­ción de ser se­lec­cio­na­dos por la provincia, y si se va a ha­cer un trá­mi­te como tra­ba­ja­dor ca­li­fi­ca­do, como mano de obra es­pe­cia­li­za­da o bajo el Ca­na­dian Ex­pe­rien­ce Class, le da puntaje adi­cio­nal a la per­so­na en el pun­ta­je del Ex­press En­try, con lo cual tam­bién se fa­ci­li­ta la ob­ten­ción de la re­si­den­cia per­ma­nen­te.

Pero, la­men­ta­ble­men­te, hay mu­chos em­plea­do­res que no es­tán dispuestos a ayu­dar a los tra­ba­ja­do­res con el ofre­cer­les un tra­ba­jo, a pe­sar de que es­tos han es­ta­do laborando para ellos du­ran­te mucho tiem­po y, en al­gu­nos ca­sos, has­ta por años.

Hace unas semanas llegó a mi ofi­ci­na una jo­ven que ha­bía es­tu­dia­do en Canadá por dos años en un pro­gra­ma de post­gra­do en una de las unievrsidades de On­ta­rio, y que es­ta­ba tra­ba­jan­do para una com­pa­ñía canadiense por más de un año. Ella puso su per­fil en el Ex­press En­try y tuvo la gran suer­te de que el Pro­gra­ma de No­mi­na­cio­nes Pro­vin­cia­les de On­ta­rio la se­lec­cio­nara para apli­car bajo el pro­gra­ma para es­tu­dian­tes. Muy con­ten­ta, lle­nó to­dos los for­mu­la­rios, ha­bló con el em­plea­dor por­que ne­ce­si­ta­ba una car­ta o unos for­mu­la­rios fir­ma­dos por él que de­mos­tra­rá que ha­bía tra­ba­ja­do para ellos du­ran­te un año y que es­ta­ban dis­pues­tos a se­guir­la empleando. Ini­cial­men­te le di­je­ron que sí, que no ha­bía nin­gún pro­ble­ma.

Pero una vez que la joven ya te­nía to­dos los for­mu­la­rios com­ple­tos y fue a ha­blar nue­va­men­te con el em­plea­dor para que re­vi­sa­ra los do­cu­men­tos, par­ti­cu­lar­men­te la par­te que les con­cer­nía a ellos para que fir­ma­ran, el empleador le dijo que no, que no es­ta­ban dis­pues­tos a com­pro­me­ter­se en fir­mar es­tos do­cu­men­tos.

Ob­via­men­te, la po­si­bi­li­dad de se­guir con este pro­ce­so que­dó anu­la­da y la jo­ven tuvo que re­nun­ciar a esa po­si­bi­li­dad, in­for­mán­do­le al On­ta­rio Immigrant No­mi­nee Pro­gram que no iba a se­guir ade­lan­te con el pro­ce­so.

De to­das ma­ne­ras, su per­fil profesional va a per­ma­ne­cer en el sis­te­ma y, cada dos se­ma­nas, cuan­do el mi­nis­tro de In­mi­gra­ción de Ca­na­dá haga los anun­cios del Ex­press En­try, pue­de ser in­vi­ta­da a ca­li­fi­car bajo al­guno de pro­gra­mas fe­de­ra­les si su per­fil lle­ga al pun­ta­je que anun­cie el mi­nis­tro.

Aho­ra, ¿qué pue­de ha­cer una per­so­na que se en­cuen­tra en esta si­tua­ción? Debe iniciar un es­tu­dio so­bre lo que ha es­ta­do pa­san­do en los úl­ti­mos meses con el pun­ta­je del Ex­press En­try, y si su pun­ta­je per­so­nal está muy de­ba­jo de los pun­ta­jes anun­cia­dos, debe bus­car la ma­ne­ra de aumentarlo. De­fi­ni­ti­va­men­te, hay for­mas de subir el pun­ta­je y, ob­via­men­te, la me­jor de to­das es con una no­mi­na­ción pro­vin­cial ya que, au­to­má­ti­ca­men­te, le otor­ga 600 pun­tos adi­cio­na­les al can­di­da­to.

Pero una ofer­ta de tra­ba­jo siem­pre es una de las for­mas más ac­ce­si­bles para au­men­tar los pun­tos, y se puede lograr a tra­vés de un nue­vo La­bour Mar­ket Im­pact As­sess­ment, es decir, cuando una per­so­na está tra­ba­jan­do en Ca­na­dá por me­dio de uno de los tra­ta­dos de li­bre co­mer­cio que tie­ne el país con mu­chos paí­ses al­re­de­dor del mun­do, como por ejem­plo con los Estados Uni­dos, Mé­xi­co, Chi­le, Perú, Co­lom­bia, Pa­na­má y di­ver­sos paí­ses de la Unión Eu­ro­pea. Tam­bién, si han tra­ba­ja­do por lo me­nos du­ran­te un año en una em­pre­sa y el em­plea­dor está dis­pues­to a dar­les una car­ta di­cien­do que es­tán muy con­ten­tos con su tra­ba­jo y que es­tán dis­pues­tos a ofre­cer­les tra­ba­jo por un tiem­po in­de­fi­ni­do. De­pen­dien­do del tipo de tra­ba­jo que está ha­cien­do, la per­so­na pue­de ob­te­ner en­tre 50 y 200 pun­tos adi­cio­na­les ha­cia el Ex­press En­try.

Otra ma­ne­ra de me­jo­rar el pun­ta­je es ha­blan­do los dos idio­mas ofi­cia­les de Ca­na­dá. Es de­cir, si la per­so­na tie­ne un buen ma­ne­jo del in­glés y del francés, pue­de ob­te­ner en­tre 25 y 50 pun­tos adi­cio­na­les de­pen­dien­do del ni­vel del se­gun­do idio­ma (sea este el in­glés o el fran­cés). Tam­bién pue­de es­tu­diar una maes­tría, etc., ya que hay dis­tin­tas ma­ne­ras con las que se pue­de ele­var el pun­ta­je, pero ob­via­men­te la ofer­ta de tra­ba­jo o el ha­ber tra­ba­ja­do en Canadá es lo que au­to­má­ti­ca­men­te lo sube.

En reali­dad es muy tris­te ver que a pe­sar de que una per­so­na se haya desarrollado res­pon­sa­ble y efi­cien­te­men­te en un tra­ba­jo, su em­plea­dor se nie­gue a ayu­dar­la con los trá­mi­tes para la re­si­den­cia per­ma­nen­te.

Pero algo im­por­tan­te para te­ner en cuen­ta es que cuan­do alguien es invitado a apli­car, ya sea por una no­mi­na­ción de las pro­vin­cias o por el mis­mo Go­bierno fe­de­ral, la per­so­na no ne­ce­sa­ria­men­te tie­ne que acep­tar la in­vi­ta­ción. Y si no acep­ta esta in­vi­ta­ción, su per­fil con­ti­nua­rá es­tan­do en el sis­te­ma y cada dos se­ma­nas ten­drá la po­si­bi­li­dad de ser in­vi­ta­da a aplicar nue­va­men­te.

Por ejem­plo, hay ca­sos en que una de las pro­vin­cias in­vi­ta a un can­di­da­to a apli­car y este no quie­re ir a vi­vir a esa pro­vin­cia, pre­fie­re me­jor man­te­ner la po­si­bi­li­dad de una apli­ca­ción a ni­vel fe­de­ral para po­der ir a vi­vir don­de este quie­ra; en­ton­ces, lo úni­co que tie­ne que ha­cer es ig­no­rar la in­vi­ta­ción, y des­pués del plazo en que su­pues­ta­men­te debe man­dar la so­li­ci­tud completa esta in­vi­ta­ción ex­pi­ra­rá, o sim­ple­men­te pue­de de­cli­nar­ la propuesta, pero el per­fil per­ma­ne­ce­rá en el sis­te­ma Ex­press En­try du­ran­te un año des­de el mo­men­to en que lo presentó.

Y, por su­pues­to, de­pen­dien­do de lo que la per­so­na esté ha­cien­do, si se encuentra en Ca­na­dá tra­ba­jan­do po­drá se­guir haciéndolo y es­pe­ran­do a que les lle­gue la pró­xi­ma in­vi­ta­ción. Y si ve que el pun­ta­je de su per­fil en el Ex­press En­try es más bajo del que anun­cia el mi­nis­tro de In­mi­gra­ción cada dos se­ma­nas, tie­ne que bus­car la ma­ne­ra de subir­lo. Aquí hay analizar diversas op­cio­nes, como la de que el em­plea­dor le dé una ofer­ta de tra­ba­jo, cómo me­jo­rar el ni­vel de in­glés o de fran­cés para te­ner los dos idio­mas oficiales del país, etc. Pero hay que bus­car la ma­ne­ra de subir el pun­ta­je para ase­gu­rar­se de que sí los van a in­vi­tar a apli­car para la re­si­den­cia permanente.

Si la per­so­na es in­vi­ta­da a apli­car por el Go­bierno fe­de­ral, ten­drá 60 días para man­dar la so­li­ci­tud for­mal con to­dos los for­mu­la­rios, con los pa­gos a in­mi­gra­ción, con las prue­bas demandadas, etc. En al­gún mo­men­to, des­pués de que envíe la apli­ca­ción for­mal, recibirá una no­ti­fi­ca­ción de que su dossier está en pro­ce­so, y si ya está tra­ba­jan­do en Ca­na­dá, con esa notificación va a poder apli­car para una ex­ten­sión de su per­mi­so de trabajo, que se denomina Brid­ging Open Work Per­mit. An­tes de la pandemia to­ma­ba en­tre 4 y 6 me­ses, pero aho­ra está tomando más tiem­po, como to­dos los trá­mi­tes inmigratorios.

Pero si la per­so­na cum­ple con to­dos los re­qui­si­tos del pro­gra­ma bajo el cual fue in­vi­ta­do a apli­car, que pue­de ser el Ca­na­dian Ex­pe­rien­ce Class, el Federal Ski­lled Wor­kers o el Fe­de­ral Tra­de, con se­gu­ri­dad va a ob­te­ner la re­si­den­cia per­ma­nen­te, solo es cues­tión de tiem­po. Pue­den pa­sar 8 me­ses, incluso un poco más, pero no hay de qué preocuparse pues es­ta­rán en Canadá con su per­mi­so de tra­ba­jo.

Si una de las pro­vin­cias los invita a apli­car, en­ton­ces de­pen­de­rá de las reglas de esa pro­vin­cia. Por ejem­plo, a esta joven que fue in­vi­ta­da a apli­car en On­ta­rio le die­ron 15 días para man­dar toda la do­cu­men­ta­ción para empezar el pro­ce­so.

Siem­pre hay que es­tar revisando estos plazos. Si es el pro­gra­ma fe­de­ral, son 60 días, y si es una de las de las pro­vin­cias, hay que verificar exac­ta­men­te los re­qui­si­tos, los cua­les se encuentran en el si­tio web de los pro­gra­mas provinciales.


Vilma Filici, presidenta de Filici Immigration Services, es profesora de leyes de inmigración y refugio en Seneca College Toronto, y asesora en materia de inmigración para diversas organizaciones comunitarias. Escribe sobre asuntos migratorios en varios medios hispanos de Toronto y es fuente de información para, entre otros, los diarios Toronto Star y Toronto Sun, y las emisoras Radio Canadá y CBC.